Sensorialidad saturada
El tecnobrega es algo así como un estilo extravagante over compuesto de prácticas de la apropiación. El Tecnobrega es antropofágo, todo lo absorbe, todo lo apropia. Al respecto de sus orígenes, si es que hay algo como eso, puede encontrarse un mix de apropiaciones sucedidas al norte de Brasil. En un terreno que se desliza entre lo falso, lo trucho y la copia desplaza construye un espacio de fiesta. Boca de Fierro, es como llaman a las cajas de sonido en estos acontecimientos. Boca de fierro es también el nombre de la fiesta escénica a la que el performer ingresa. Allí, él se mueve, es performer y nos hace público, es performer y nos hace parte.

¿Por qué traer el mundo a la ficción? Con algo tan del contexto, ¿qué sentido hace en otros contextos? Tal vez hacer ficción es un modo de trabajar con un material sensible, propio a la identidad pero desplazada a los bordes, para subrayar en ella su ficción. Entre el documental y la escena muy cerca de la persona real un material opera en la ficción. Desde ahí sienta una provocación, volver ambigua la identidad. Identidad no como algo igual a sí mismo sino parte de una identificación.

¿Qué puede el arte? Entre muchas otras cosas, como particular red de prácticas y sentidos, puede soportar el ingreso de múltiples capas. Boca de fierro, toma una identidad, asume su identificación, acepta ese material mutable y constitutivo. Entre desplazamientos de beats y sentidos, se apropia de lo apropiado y opera una reflexión que se actualiza cada vez.

Mientras tanto, entre la violencia y el goce están nuestros cuerpos. Presencia radical, sensorialidad del asco. Deserotización erotizada que nos lleva a perseverar. Chorrear de verdad lo que sabemos simple verósimil. Este asco te interpela. Te atrae en su verosímil y pone en cuestión el estereotipo. Enfrentados a una incomodidad de indefinir, se desborda de una sensorialidad saturada. Estar en Boca de fierro es como asistir a una secreción de intensidad. De un encuentro visceral entre la saliva y un colorante Boca de fierro hace un mundo real y poético.
Por Micaela Moreno Magliano
Sobre obra Boca de fierro